Ruta O Carreiro do río. (Zas)
La ruta O Carreiro do río PR-G-270 se encuentra en la parroquia de Baio, en el municipio de Zas, en la Costa da Morte, provincia de A Coruña.
Este sendero, homologado el pasado año 2024, ha sido posible gracias al trabajo de la Asociación de vecinos de Tabeirón de Baio. Un espléndido recorrido que discurre por las orillas de los ríos Grande y Zas, mostrándonos el gran patrimonio natural y etnográfico del municipio.
A lo largo de sus doce kilómetros, caminaremos a través de hermosos bosques, donde destacamos la impresionante Carballeira de Baio (robledal), un gran número de puentes, molinos, con sus canales y presas, saltos de agua y los restos de un monumento megalítico.
La ruta O Carreiro do río se encuentra perfectamente acondicionada y señalizada, y es un planazo ideal para cualquier época del año, siendo el otoño la estación por excelencia de los bosques y ríos, ahí lo dejo.
Cómo llegar al inicio de la ruta:
La ruta tiene 6 kilómetros lineales y comienza en la Plaza Jorge Mira Pérez, donde aparcamos fácilmente.
Comenzamos caminando sobre un sendero empedrado a la par de un carril bici para niños, nos llama la atención unas bonitas tallas de madera con forma de animales que están al lado del río y más adelante un pequeño merendero, entre puentes.
A los pocos metros, siguiendo las indicaciones, nos desviamos hacia el sendero que bordea el río y donde se encuentra la Carballeira de Baio (robledal), formada por 300 carballos, que alcanzan los dos siglos de edad y los veinte metros de altura.
Este espectacular conjunto arbóreo está incluido desde el año 2022 en el Catálogo de Árbores Senlleiras de Galicia (Árboles Singulares).
¿Qué es un Árbol Singular? Es un ejemplar que destaca por sus características extraordinarias: tamaño, edad, rareza, belleza, significación histórica y/o cultural, y son consideradas reliquias botánicas, siendo un valioso legado que ha resistido a los rigores del tiempo.
Donde termina la Carballeira nos encontramos el primer puente, muy fotogénico, que es mitad de piedra y madera.
Cruzamos y caminamos río arriba dejando para otra ocasión la visita al molino de Genaro, que se encuentra a 610 metros.
Caminamos sin perdernos ni un detalle de todo lo que nos vamos encontrando, la siguiente parada es una presa, esta fue construida para acumular agua para el funcionamiento del molino, en esta ruta veremos unas cuantas, y que forman pequeñas cascadas otorgándole más belleza al lugar.
Nuestra siguiente parada fue para observar unas poldras del río, que al ir tan cubiertas por el agua apenas se percibían.
Al poco rato nos encontramos en el área recreativa de Pedra Vixía, con mesas, asadores, puentes y un paisaje de película.
Volvemos al camino para continuar bordeando el río, atravesamos unos brañas, con sus piedras y pontellas, alcanzamos otro puente que nos desvia hacia la izquierda.
Este tramo es una pista ancha y recta y nos lleva a conocer los restos del Dolmen Pedra Vixía, un monumento funerario del megalítico, que se nos pasó.
Seguimos caminando y antes de alcanzar de nuevo el área recreativa, encontraremos más molinos, puentes, saltos de agua y un gran pedrusco con forma bastante curiosa, según el ángulo en que la mires parece un elefante.
Dejamos atrás el área y continuamos caminando muy pegados al río, debemos prestar atención donde pisamos para evitar resbalones.
Al llegar al Puente Lodoso debemos cruzar con precaución la carretera y continuar, en este tramo encontramos varios grupos de castaños y hallas y también algún eucalipto.
La senda de ida finaliza en la carretera y debemos cambiar de orilla para volver. Por este lado del río nos encontramos un parque con un columpio y tirolinas y un gracioso túnel de bambú, que es una especie exótica invasora y necesita mucha tala para mantenerla a raya.
También pudimos observar el lugar exacto donde se unen los ríos Grande y Zas, que está a poca distancia del campo de fútbol, y cuenta con molinos y varios puentes.
El recorrido es estupendo en todo momento, muy ameno y bonito, y en nada se termina, cuando nos dimos cuenta ya estábamos de nuevo en la Carballeira de Bao, que me dejó asombrada por lo preciosa que es.
Esta es una de las rutas que teníamos ahí pendientes, esperando su momento, y la verdad es que nos ha sorprendido muy gratamente.
Por lo general las sendas fluviales de ríos pequeños en verano, pierden esa gracia que les da el agua, ya que el río baja bastante de caudal y apenas se pueden ver los saltos y las cascadas que forman las presas.
Así que si tienes la oportunidad de visitar A Costa da Morte, reserva una jornada para dedicársela a la ruta O Carreiro do río, te aseguro que te sorprenderá como a mí.
Dar la enhorabuena a la asociación de vecinos de Tabeirón de Baio por el excelente trabajo que ha supuesto el acondicionamiento y homologación de la ruta, y que continúe así por años venideros, ya que estos senderos necesitan un esfuerzo continuo para conservar su buen estado, debido a la gran cantidad de puentes de madera y a la rapidez con que las hierban se apoderan de los senderos.
Ha sido un enorme placer conocer la ruta O Carreiro do río. Hasta la próxima.
Y a ti gracias por leerme.