Ruta dos muiños do Xábrega (Ribeira Sacra)
La ruta dos muiños do Xábrega se encuentra en el municipio lucense de Sober, en la comarca de Terra de Lemos, que a su vez forma parte de la Ribeira Sacra, famosa por sus viñedos y miradores de infarto al cañón del río Sil.

Este territorio abarca las riberas de los ríos Sil, Cabe y Miño, entre el sur de la provincia de Lugo y el norte de la provincia de Ourense.
La ruta dos muiños do Xábrega es un tramo integrado al sendero de los viñedos de A Ribeira Sacra, aunque se puede realizar de forma independiente.

Es un recorrido de poco menos de seis kilómetros entre ida y vuelta, ten en cuenta que la ida es casi toda en ligero ascenso y la vuelta en descenso, aunque también hay tramos llanos son los que menos.
En este bonito recorrido a lo largo del regato de Camilo o Xábrega, afluente del río Sil, nos encontramos un importante conjunto de molinos de agua, antiguamente existían 28 molinos y 2 batanes.
Durante el pasado siglo dejaron de utilizarse y el paso del tiempo fue cebándose con alguno de ellos, agravando tanto su mal estado que incluso alguno llegaron a desaparecer.

A día de hoy, ocho de ellos se encuentran totalmente restaurados, un trabajo extraordinario realizado por uno de los talleres municipales de empleo.

Si estás por la zona no dejes de recorrer este maravilloso sendero, que aún en verano sigue conservando su intenso color verde.
Cómo llegar al inicio de la ruta:
La manera más cómoda es llegando hasta el Mirador de Os Chancís, donde podrás aparcar cómodamente. Nos dejes de subir hasta él y contemplar las maravillosas vistas que ofrece al cañón del río Sil.
Caminamos unos 200 metros carretera arriba hasta encontrar el letrero con el inicio de la ruta y que nos adentra de forma inmediata al bosque.

Nosotros realizamos la ruta a comienzos de septiembre y el riachuelo apenas llevaba agua, sin embargo podíamos oirla fluir suavemente en los pocos pozos que conservaba.
Después de unos 400 metros encontramos el primer molino, y poco a poco de forma sucesiva fueron haciendo aparición los otros. Diferentes entre sí, algunos con sus canales, con puentes de piedra, escaleras, pasarelas y merenderos.

Un lujo poder disfrutar de este hermoso sendero.

Al llegar al último molino debes dar la vuelta por el mismo lugar.

Ha sido un gran placer descubrirte, espero y deseo volver en otra época con más agua. Hasta pronto Sober.
Y a ti, gracias por leerme.
